Harry Potter envejece. Los niños ya no quieren crecer con él. Ya no les ofrece un misterio o un enigma. Al abrir las primeras páginas, ya conocen el final. Las nuevas generaciones han visto antes las películas que los libros. Sin querer, la novela ha perdido su magia.
Es verdad que la saga del libro sigue siendo un superventas. En los centros comerciales, hay cientos de ejemplares de él. Pero ya no están en las mejores estanterías ni en novedades. Han sido desplazados. Ya no llaman la atención ni son los protagonistas.
Mientras se toca su vieja cicatriz, su legendaria marca de identidad, Harry Potter se siente orgulloso de lo que ha conseguido: miles de niños, de cientos de países, han amado la lectura gracias a sus aventuras.
Sin embargo, también se sabe en una dolorosa encrucijada:
Por un lado, le espera el olvido, la muerte, convertirse en un libro anacrónico, que ya nadie lee, salvo por obligación en la escuela.
Por otro lado, un cartel le indica la dirección hacia los clásicos, para convertirse en una historia perenne, al estilo de Peter Pan o el Mago de Oz.
El desea con todas sus fuerzas emprender este último camino, aunque duda si algún día llegará a su final.
No es tan facil que un fenómeno como el que originó Rowling se olvide. Creo que sí será un clásico.
ResponderEliminarLo que yo he detectado entre mis alumnos de 12 años es que Harry Potter ya no les atrae.
ResponderEliminarEl fenómeno ahora es la saga "Crepúsculo" y otros títulos de fantasía/ romántica.
Es verdad que alguno ha leído algún libro de Harry Potter (el primero o el segundo), pero ya no sienten esa necesidad de llegar hasta el final.
Si llega a ser un clásico o no, el tiempo lo dirá.
creo que crepusculo morira mas rapido que hp,
ResponderEliminarYo lo creo también...
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