jueves, 30 de diciembre de 2010

LIBROS / NAVIDAD 2010

Como todos los años, Adolfo Torrecilla ha preparado una selección de libros para leer durante las vacaciones o para regalar en Navidad. El criterio de Adolfo, aunque exigente y fuera de las modas, es del todo fiable. Por lo menos, para mí.
En el apartado juvenil, podéis encontar libros de amigos míos como César Fernández ( La última bruja de Trasmoz) o Julio César Romano (El libro de Sykem). No os los perdáis.
En la lista únicamente echo en falta algún título de Javier Negrete, que cada vez es un escritor más importante, pero imagino que Adolfo no puede estar ni llegar a todo.
En definitiva, si queréis ir más allá de los best-seller o de la literatura comercial, ya sabéis donde encontrar una lista de libros totalmente recomendables.

Os dejo el enlace:

martes, 28 de diciembre de 2010

SOLO UN APRENDIZ


¿Qué es un experto o especialista en LIJ?

¿Alguien que se ha pasado años y años estudiando e investigando sobre la la literatura infantil y juvenil?, ¿que tiene cientos de publicaciones sobre el tema en revistas especializadas?, ¿que tiene una amplia y reconocida experiencia en este campo?, ¿que ha escrito y publicado miles de obras en este género?, ¿que conoce y se relaciona con todos los autores vivos del momento?, ¿que ha leído absolutamente todo sobre el tema, incluso los manuscritos malogrados que nadie quiere editar?
En verdad, no sé en qué consiste eso de ser un especialista en LIJ. Si alguien lo sabe, que me lo explique despacio, por favor.
Yo, por ahora, me considero sólo un aprendiz.
  

viernes, 24 de diciembre de 2010

NOCHEBUENA


El poema no es mío, por supuesto, sino de uno de mis poetas preferidos, Amado Nervo.
Feliz Nochebuena y Noche de Paz.

Nochebuena


Pastores y pastoras,
abierto está el edén.
¿No oís voces sonoras?
Jesús nació en Belén.

La luz del cielo baja,
el Cristo nació ya,
y en un nido de paja
cual pajarillo está.

El niño está friolento.
¡Oh noble buey,
arropa con tu aliento
al Niño Rey!

Los cantos y los vuelos
invaden la extensión,
y están de fiesta cielos
y tierra... y corazón.

Resuenan voces puras
que cantan en tropel:
Hosanna en las alturas
al Justo de Israel!

¡Pastores, en bandada
venid, venid,
a ver la anunciada
Flor de David!...

jueves, 23 de diciembre de 2010

SKELETON CREEK


Tenía curiosidad en saber qué era eso de la literatura transmedia o interactiva. Por eso, me he leído los dos libors de la colección SKELETON CREEK del escritor estadounidense Patrick Carman, un verdadero experto en manejar las tramas de suspense y  de misterio.
Aunque no me convence del todo la mezcla de vídeo y de novela tradicional en un solo producto, tengo que reconocer que he aprendido mucho mientras los leía.
La literatura transmedia o interactiva no es un experimento o una moda pasajera, sino una nueva línea o género narrativo que tiene su hueco en el panorama literario actual, sobre todo en el juvenil.
Puede que al lector adulto y experimentado le cueste entrar en este tipo de obras, pero los chicos lo tomarán con mayor naturalidad, como parte de su mundo anfibio entre la cultura de siempre y la nueva cultura digital. 
Os dejo el enlace de la reseña que he escrito para la revista Culturamas: 

lunes, 20 de diciembre de 2010

EN CUADRO

Quizás en la foto no se aprecie muy bien, pero el cuadro que ha realizado Miguel Luis Sanz, a partir de mi novela La herida del oso pardo (Palabra, 2010), es precioso. Me encanta. Es como si los personajes del libro tuvieran una segunda vida, una segunda creación, silenciosa y a todo color. Parece que las imágenes que había entrevisto entre brumas, como detrás de un visillo, tomaran de pronto forma  y me miraran con ojos de sorpresa. Me gusta la osa con sus dos esbardos, el paisaje otoñal que pisan, los picos desnudos que se adivinan al fondo...Gracias, otra vez, Miguel.

sábado, 18 de diciembre de 2010

CANCIÓN DE NAVIDAD

Tengo que reconocer que en esto de las fiestas soy muy clásico y tradicional. Por eso me he acordado hoy del señor Scrooge y de los tres espíritus de la Navidad. Aunque no es la obra mejor del autor inglés, me ha parecido siempre una obra redonda, agradecida, que funciona con la exactitud de un reloj.
Me lo pasé muy bien cuando lo leí (y no era precisamnete un niño). Quizás por eso le gurado tanto aprecio.
Dickens la escribió durante un viaje a Italia (y en pleno verano, si no recuerdo mal), pero nos sumerge en el corazón del invierno y de las noches mágicas donde todo puede ocurrir y cambiar.
Hoy en día, el tono bonachón y afable del libro no se lleva, ya que no trasgrede, ni rompe con nada. Ya no se escriben este tipo de historias y, seguramente, ninguna editorial las publicaría tampoco. Ahora únicamente se paradían, se reinventan o se hace una versión cinematrógrafica de ellas.
Toda esta larga introducción se debe, simplemente, a que quería desearos a todos: ¡¡¡Feliz Navidad!!!

lunes, 13 de diciembre de 2010

OTRO ENTERTAINER


Ahora que a los escritores nos gusta tanto contar nuestra vida y milagros a través de los nuevos canales que nos ofrecen las tecnologías, me he acordado de una cita de un poema que leí hace mucho tiempo, cuando iba a la universidad, y que siempre me ha influido en mi manera de entender la literatura.
Cuando el poeta  mexicano José Emilio Pacheco escribió este poema (1983), no existía Internet, ni había blogs, ni redes sociales y el único sitio donde se chateaba, por lo menos en Españaera en los bares. 
Sin embargo, creo que la cita tiene más actualidad que nunca, ya que señala con claridad uno de los males de la literatura contemporánea.
Os dejo un fragmento del poema títulado Una defensa del anonimato. A ver qué os parece. El poeta habla sobre la poesía, pero su mensaje se puede extender también - por lo menos, yo lo creo así- a la creación literaria en general: 

"Extraño mundo el nuestro: cada día
le interesan más los poetas;
la poesía cada vez menos.
El poeta dejó de ser la voz de su tribu,
aquel que habla por quienes no hablan.
Se ha vuelto nada más otro entertainer.
sus borracheras, sus fornicaciones, su historia
clínica,
sus alianzas o pleitos con los demás payasos del circo,
o el trapecista o el domador de elefantes,
tienen asegurado el amplio público
a quien ya no hace falta leer poemas.

Sigo pensando
que es otra cosa la poesía:
una forma de amor que solo existe en silencio,
en un pacto secreto, entre dos personas,
de dos desconocidos casi siempre".

viernes, 10 de diciembre de 2010

LIJ ACTUAL


Gracias a la cortesía y generosidad de Jorge Gómez Soto, se me acaba de incluir en la lista de escritores  que aparece en el blog Literatura Infantil y Juvenil Actual.
No voy a descubrir nada sobre esta página, uno de los blog más actualizados e interesantes que hay sobre LIJ en nuestro país.
Os dejo el enlace. Allí podéis encontrar información sobre cualquier escritor que se dedica a escribir para niños y jóvenes.

http://lij-jg.blogspot.com/2006/10/webs-y-blogs-de-escritores-de-lij.html

martes, 7 de diciembre de 2010

EN FACEBOOK

Soy más bien tímido y un poco torpe en las relaciones sociales; por eso, seguramente, he tardado tanto en hacerme una página en facebook.  Ese mundo no es el mío.  Quien haya leído alguna de mis novelas habrá descubierto que me gusta más la soledad de las montañas, los lugares nevados y extremos, las fieras salvajes que viven asiladas, lejos de las ciudades y sus redes de comunicación. Sin embargo,todo escritor parece ahora que debe estar en facebook. Pobre de él, si no lo está.
Pues eso, que yo también he caído. Pero me siento extraño, como si hubiera entrado a la fuerza en un mundo que no fuera el mío.

sábado, 4 de diciembre de 2010

YO CONOCÍ A MUELLE


Hoy aparece publicada una nueva colaboración mía en la revista digital Culturtamas. Se trata de una reseña del libro YO CONOCÍ A MUELLE de Jorge Gómez Soto, finalista del Premio Gran Angular 2009 de la editorial SM.
Os invito a leer la reseña y, por supuesto, el libro.
Aquí está el enlace:

http://www.culturamas.es/blog/2010/12/04/%e2%80%98yo-conoci-a-muelle%e2%80%99-de-jorge-gomez-soto/

viernes, 3 de diciembre de 2010

UNA CITA "NOBELESCA"

Muchas veces he oído escuchar que la literatura infantil y juvenil  (LYJ) es una literatura facilona, de segunda fila, a la que se dedican los autores que no tienen talento para dedicarse a escribir de verdad.
Hoy sólo quiero compartir con las cuatro seguidores que me sufren una cita "nobelesca", de J. Saramago, para ir contracorriente, para no estar de acuerdo, para ejercer mi derecho a disentir.

A ver qué os parece:

"Las historias para niños deben escribirse con palabras muy sencillas, porque los niños, al ser pequeños, saben pocas palabras y no las quieren muy complicadas. Me gustaría saber escribir esas historias, pero nunca he sido capaz de aprender, y eso me da mucha pena.
Porque, además de saber elegir las palabras, es necesario tener habilidad para contar de una manera muy clara y muy explicada, y una paciencia muy grande. A mí me falta por lo menos la paciencia, por lo que pido perdón".


¡Feliz Puente ( al menos, a los que lo tengan)!

lunes, 29 de noviembre de 2010

LITERATURA TRANSMEDIA

Al parecer, lo que yo llamé en una página de este blog  libros enriquecidos recibe también en otros sitios el nombre de literatura "transmedia" o "interactiva". Se trata de una nueva forma de entender la edición, vinculada a las nuevas tecnologías, que excede el concepto tradicional de "libro".
Voy a poner varias ejemplos:
Skeleton Creek / El Fantasma de la Dragra es la 2ª entrega de la trílogía del autor norteamericano Patrick Carman. Se trata de una historia de misterio en la que  para desvelar el enigma el lector tiene que visionar varios vídeos asociados al libro. Según se avanza en la lectura, se van dando las contraseñas que dan acceso  al material audiovisual, que complementa la historia.
Otro ejemplo - y este genuinamente español - es la última novela de Fernando Marías publicada recientemente por SM. Un libro que incluye diversos códigos: cómic, guión de cine, páginas web... Un libro que, como asegura su propio autor en una entrevista, "se empieza sin tener que leer".
Yo creo que con este tipo de obras la labor del autor queda devaluada o, por lo menos, pasa a un segundo plano. El autor sigue siendo una pieza clave, como el guionista en una película, pero pierde importancia.
El que verdaderamente crece, el que cada vez va a tener más peso en este nuevo mundo digital, es el editor; el que cordinará como un director de cine este tipo de nuevos proyectos multimedia, con sus multiples aplicaciones y contenidos.
Es verdad que el editor ya cumplía este papel de "co-autor" en la edición en papel, pero en la innovadora edición digital se convertirá, sin lugar a dudas, en el protagonista, en la estrella indiscutible, en el principal creador de la obra interactiva que se edita.

miércoles, 24 de noviembre de 2010

CULTURAMAS

Hoy se acaba de publicar mi primera colaboración en la revista digital Culturamas en la sección de Librolandia, dirigida y cordinada por Carmen Fernández Etreros.
Se trata de una entrevista al escritor de LYJ César Fernández García, ganador de XXV Premio Jaén de narrativa juvenil con la novela ELLOS y del premio La Galera Jóvenes Lectores con su libro LA ÚLTIMA BRUJA DE TRASMOZ.
Cuando aparezca otra colaboración literaria, os lo iré diciendo en el blog, por si os apetece echarle un vistazo.
Os dejo aquí abajo el enlace:

martes, 23 de noviembre de 2010

FINAL ABIERTO

Me llegan las valoraciones y las opiniones personales de algunos de los jóvenes que han leído mi novela Días de lobos durante este primer trimestre del curso.
La mayoría asegura que el libro les ha gustado mucho, que les parece interesante, que es bastante entretenido y lleno de giros inesperados; pero también afirman que no les convence el final, que es demasiado abierto.
Dicen que quieren saber qué pasa después con los dos protagonistas, Sofía y Tito; que, al final, tampoco se sabe bien si ella llega o no a cenar con su madre en Navidad.
En definitiva, les sabe a poco... Quieren y necesitan saber más.
En realidad, yo había escrito ya ese final donde se cierra todo, donde no queda ningún cable suelto, pero me pareció mejor un desenlace abierto y lo quité. Así, era mucho más interesante, más lírico, más sugerente.
Sin embargo, mis lectores juveniles, al parecer, hubieran preferido lo contrario.
Tomo nota.
Por cierto, la historia de Tito y Sofía no acaba ahí. No me he olvidado de ellos. Les esperan muchas más sorpresas y aventuras.
Os lo prometo.

viernes, 19 de noviembre de 2010

EN LIBROLANDIA


LIBROLANDIA es la sección de la revista digital Culturamas dedicada a la LYJ.
Coordinada por Carmen F. Etreros, en ella podemos encontrar una oferta muy variada: reseñas de novedades en literatura infantil y juvenil, agenda con la actualidad en el sector, interesantes y profundas entrevistas a escritores, libros de fondo de armario (de los que nunca pasan de moda), información sobre talleres y actividades...
Lo mejor de LIBROLANDIA es que no es una página simplemente especializada, sino una sección dentro de una revista cultural más amplia, llena de novedades y de vida.
Eso me gusta.
La LYJ no es un gueto, un mundo aislado, un barrio donde viven los autores marginados por la Literatura escrita con mayúsculas; sino una parte más de la cultura viva, que se publica y edita en este país.
LIBROLANDIA es un ejemplo de ello.

miércoles, 17 de noviembre de 2010

PÁJAROS DE LA VICTORIA


Mi última novela juvenil acabada - y que ahora da vueltas y vueltas como una peonza por los laberínticos pasillos de las editoriales- trata de un soldado republicano, apodado "Piter", que combatió en la Sierra de Guadarrama durante la Guerra Civil.
Para crear al protagonista me basé en algunas fotografías sacadas de Internet, pertenecientes al Batallón Alpino Juventud,  al que el poeta Emilo Prados dedicó un emotivo poema titulado "Pajaros de la Victoria".
Os dejo algunas de las imágenes que encontré. Piter, de forma tímida, aparece en una de ellas.
¿Sabrías decir cuál es?




lunes, 15 de noviembre de 2010

LA LETRA "YE-YE"


Hoy leo por casualidad en el periódico que la mayoría de escritores españoles se resisten a no acentuar el adverbio "solo" y a llamar "ye" a la letra "Y", tal y como establecerá la nueva ortografía que las Academias de la Lengua ratificarán en México el próximo día 28.
En la lista de escritores se encuentran autores de la talla de Antonio Colinas, Soledad Puértolas, Martín Garzo, Juan José Millás y también, sorprendentemente, Muñoz Molina (que es miembro de la Academía contra la que combate).
Desde fuera, el cambio propuesto por la Asociación de Academias de la Lengua puede parecer una tonteria, una chorrada, un capricho que han tenido los académicos mientras se tomaban el  rutinarioWhisky de los jueves.
Sin embargo, la reforma ortográfica tiene su lógica y sentido, aunque nos cueste verlo.
Detrás de esta reacción purista en contra de la reforma ortográfica, hay también cierto nacionalismo lingüístico y un temor a perder el control sobre nuestra lengua. Muchos piensan  (y no solo los escritores) que el verdadero nombre de la grafía "Y" es "i griega", como se lo han enseñado de pequeños en el colegio y, además, como debe decirse.
Estas personas olvidan que la mayoría de los hablantes de su lengua, sobre todo en América, no lo llaman así, sino de la forma que ahora se va aprobar: letra ye.
Yo, mientras tanto, intento que mis alumnos del instituto escriban bien, que no pongan "yendo" con "ll", que es lo que suelen hacer.
¡Eso sí que es una revolución ortográfica y no la que propone la Academia!

viernes, 12 de noviembre de 2010

LYJ COMPROMETIDA

Una vez oí decir a Fernando Marías que escribió una novela sobre los atentados del 11-M y que ninguna editorial se la quiso publicar. Fue una experiencia frustrante; pero también, aseguró, por la que cualquier escritor ha tenido que pasar alguna vez.
La negativa no dependía de la calidad literaria de la obra, sino de lo "problemático" del tema. Era un tabú, un asunto que no se debía tratar y menos aún en la Literatura juvenil.
Las editoriales suelen preferir novelas de género: de fantasías al estilo "gallego", de vampiros estilizados y sin maldad, de misterio o de intriga, de mascotas metidas a detectives sabuesos,... Esa es la línea. Lo de siempre, vamos. Lo que no molesta, ni compromete a nada.
A veces, es verdad, una novela juvenil  de las que se consideran "comprometidas" gana algún premio, para que no se diga que no se transmiten valores. Pero siempre - y eso conviene no olvidarlo- debe estar dentro de lo políticamente correcto. Nada de transgredir o de ir contracorriente.
Seguramente, las editoriales tienen razón. El principal objetivo de la LYJ debe ser ayudar a los chicos y chicas a leer, a disfrutar de los libros, y las novelas de género cumplen perfectamente ese cometido.¿No es suficiente?
Sin embargo, siempre será una literatura escapista, alejada de los problemas del mundo, encerrada en una frágil burbuja, muy parecida a Neverland.

lunes, 8 de noviembre de 2010

LIBROS ENRIQUECIDOS

Dicen que los libros digitales estarán "enriquecidos" en el futuro, que ofertarán algo más que una historia contada con palabras, que incluirán vídeos sobre las escenas, entrevistas con el autor, incluso publicidad para hacer más rentable la edición de la obra.
El concepto, no obstante, no es nuevo. Ya desde la Antigüedad la Literatura ha sido "enriquecida" por otras disciplinas afines, como la música o el dibujo. Los trovadores medievales recitaban sus composiciones acompañados de las melodías de instrumentos como el laúd. Las ilustraciones de Doré o de Dalí "enriquecerán" para siempre El Quijote de Cervantes, ya de por sí tan fecundo e inspirador. 
Cuando en la actualidad se habla de los libros digitales "enriquecidos", creo que los gurús de las nuevas tecnologías se refieren a algo mucho más mediocre y sin tanta calidad artística. Simplemente, a añadir extras al texto, como podemos ver en las películas en formato DVD.
Esos libros "enriquecidos", por lo menos a mí, no me interesan. Sería más sugerente, por ejemplo, incluir vídeos creativos que desempeñaran una función similar a las ilustraciones de los libros tradicionales, tan habituales en la Literatura Infantil y Juvenil.
En definitiva, la unión de la Literatura y la Videocreación, de la palabra y la imagen.
Pero los escritores, me temo, tendremos muy poco que decir en todo esto. Como siempre, serán las editoriales la encargadas de decidir.

domingo, 7 de noviembre de 2010

LOBOS EN MANISES


El otro día, cuando os comentaba los centros de enseñanza que habían puesto como libro de lectura a mi novela Días de lobos, se me olvidó mencionar al colegio Sagrada Familia de Manises (Valencia).

Durante el curso leerán de forma obligatoria sólo tres libros: La casa del acantilado de Mirem Agur Meabe, La hija de la noche de Laura Gallego y el mío, que he citado arriba.

Será durante el tercer trimestre, cuando el curso ya esté acabando, allá por la primavera.

Mis mejores aullidos desde aquí.

Ojalá que a los alumnos les resulte un libro entretenido e interesante, que no les aburra y que, de paso, les ayude a amar la Literatura.

jueves, 4 de noviembre de 2010

UN E-BOOK POR NAVIDAD

Dicen que va a ser el regalo estrella de las Navidades, que se va a vender como churros, que las editoriales lo temen igual que el traicionero puñal que les va a dar la puntilla.
Desde el sofá de mi casa, intento imaginarme a los futuros usuarios de los libros electrónicos. La mitad aproximandamente serán buenos lectores, amantes de la literatura, que probarán suerte en este nuevo formato. Pero la otra mitad, me temo, serán fanáticos de la tecnología, ávidos de poseer el último capricho digital. Estarán más pendientes del continente que del contenido. No les importará el libro, sino el canal que lo difunde.
Una vez acabada la borrachera de las compras, mucho se preguntarán para qué quieren ese nuevo trasto informático. Se cansarán del nuevo juguete y lo dejarán aparcado.
¿No sería más fácil descargarse el libro directamente en el ordenador portátil que ya poseo? ¿Por qué las editoriales no lo hacen?
La respuesta es fácil. Sería su suicidio,  su muerte definitiva. Si se puede leer un libro gratis, y más si es  pirata, para qué quiero comprarlo en la librería o en el hipermercado.
Mientras tanto, sigo escribiendo mi próxima novela. Lo único que sé es que cada vez será más difícil colocarla, que las empresas editoriales irán a lo seguro y no querrán correr ningún riesgo.
También puedo ofrecer la novela gratis en este blog, por ejemplo. Pero la verdad es que  nadie la leería con detenimiento, salvo mis cuatro o cinco sufridos lectores.
No parecería un libro profesional. Sólo un borrador. La obra de un aficionado.

domingo, 31 de octubre de 2010

OJOS DE CENIZA

(Inicio de una novela, que se quedó en cuento)


-¿Adónde vas?- le preguntó Mariana por sorpresa.

Gerardo, su hermano mayor, guardó algo debajo de la ropa y se detuvo con precipitación en el umbral de la puerta. A pesar de la penumbra que le rodeaba, reconoció dos pupilas nerviosas que le observaban. Estaban temblorosas, agitadas caprichosamente por las sombras.

-No te preocupes, sólo voy a dar una vuelta.

Mariana no le creyó. Últimamente, desde que se juntaba con esos chicos y salía de casa a escondidas, nunca lo hacía.

-Vas con ellos, ¿verdad?

-Cállate, no te metas en mis cosas.

Malhumorado, el hermano mayor se dio la vuelta y siguió su camino hacia la calle. Vestía una camiseta amplia de color claro, zapatillas blancas sin cordones y un pantalón de chándal con las perneras arrastrando por el suelo. Aunque era de noche, llevaba puesta una gorra en la cabeza.

Al levantar la mano para girar el picaporte, se le cayó el objeto que llevaba escondido debajo de la ropa. Era de metal, bastante pesado, y resonó en la noche igual que un trueno malsano.

Aunque no podía ver bien de lo que se trataba, Mariana tuvo una oscura intuición. Parecía un arma de fuego. Sí, una pistola. Como las que llevaban ellos, los pandilleros, los chicos con los que últimamente se juntaba.

-Tú no has visto nada, ¿entiendes? – le amenazó su hermano, levantando la voz.

Mariana no se atrevió a rechistar. Sobraban las palabras. Todas las cartas ahora estaban puestas boca arriba. De nada servía negarlas, ir en contra de ellas.

Entretanto, el hermano recogió rápidamente la pistola del suelo y salió de la vivienda cerrando la puerta contrariado. Todavía amedrentada, Mariana corrió a una ventana cercana, cubierta con visillos, y se puso a espiarle a través de los cristales salpicados de polvo.

En medio de la oscuridad le vio caminar deprisa, solo, como un perro abandonado. Sintió lástima por él, pero a la vez un profundo y doloroso malestar. Durante años había considerado a su hermano mayor como un ejemplo, como un ídolo al que adorar, como un modelo a seguir. Pero ahora...

No le reconocía. ¿Qué había ocurrido?

Su imagen se había difuminado como los colores de una desgastada fotografía. De la noche a la mañana, sin que apenas nadie se hubiera dado cuenta, se había convertido en otro hombre, en un chico sombrío y taciturno, amante del peligro.

Al final de la avenida, al lado de una farola de luz mortecina, le esperaba un destartalado coche con los faros encendidos. Dentro de él había un grupo de jóvenes, dando sonoras carcajadas.

Su hermano se subió al vehículo con determinación, sin mirar en ningún momento hacia atrás. Saludó a sus amigos con la mano izquierda, realizando unos gestos rituales con los puños, y luego sentó en el único asiento que quedaba vacío. Uno de sus amigos intentó arrancar el motor, pero no le dio tiempo a ponerlo en marcha.

De improviso, apareció otro coche de color blanco, recorriendo la avenida a toda velocidad. Llevaba las ventanillas bajadas, aunque hacía bastante frío, y se dirigía hacia ellos como un ciego kamikaze. Iba pilotado por otro pandillero, acompañado de otros chicos de no más de 20 años, pero pertenecientes a una banda rival.

En medio de la noche sonaron varios disparos, que taladraron la chapa metálica del vehículo igual que un barril oxidado. Los que estaban dentro del auto apenas pudieron defenderse. Únicamente les dio tiempo a esconder la cabeza entre los desgastados asientos y tirar las latas de cerveza al suelo. Habían caído en una emboscada, en una trampa calculada, pero ninguno fue capaz de reaccionar como un valiente.

Desde el interior de la casa, Mariana contempló toda la escena sobrecogida. Un violento grito brotó de su garganta, pero se tapó la boca con las dos manos para que nadie lo pudiera escuchar desde fuera de la casa.

Estaba asustada, temblando compulsivamente, congelada por el miedo.

Casi al mismo tiempo, su hermano salió del coche. Estaba herido y se tambaleaba como si acabara de salir de un naufragio de sangre. Luego avanzó unos cuantos pasos hacia delante, sin rumbo fijo, y se desplomó bruscamente en el asfalto.

El coche de color blanco desapareció por el fondo de la avenida. En las viviendas cercanas se encendieron varias luces, aunque nadie se atrevió a asomarse por la ventana. Una estridente sirena, tal vez de la policía, se escuchó a lo lejos.

Mariana se apartó del cristal polvoriento y permaneció unos segundos contra la pared de ladrillos. Notó una fuerte presión en la boca del estómago, como si le acabaran de dar una patada.

-¡Mamá!- se atrevió finalmente a chillar.

Su madre, que también había escuchado los estallidos de las pistolas, encendió de inmediato la luz del dormitorio y bajó las escaleras de madera corriendo, muy preocupada, poniéndose una fina bata sobre los hombros.

-¿Qué ha pasado?- preguntó al ver a su hija pálida y todavía despierta a esas horas.

-¡Le han disparado! – exclamó entre lágrimas.

-¿A quién? – volvió a preguntar la madre, sin comprender del todo lo que ocurría.

-¡A Gerardo! - confesó la muchacha descorriendo el visillo- ¡A mi hermano!

La madre se puso tensa y se asomó por el cristal con la respiración agitada. Al ver el cuerpo de su hijo sobre la carretera, notó que el pecho se le desgarraba en dos mitades asimétricas. De forma instintiva, se alejó de la ventana y corrió hacia la puerta de la casa para salir en ayuda de su hijo.

Mariana la siguió temerosa, a cierta distancia, como una tímida mascota que no se atreve a molestar demasiado a su amo.

Mientras tanto, su hermano continuaba tumbado en la carretera, agarrándose con desesperación una pierna manchada de sangre oscura y espesa. Sus desesperados lamentos parecían los de un lobo abatido por un cazador furtivo.

Los demás miembros de la pandilla habían desaparecido en desorden, poniéndose a la fuga, como una manada en estampida. El coche estaba abandonado en medio de la calle, con las puertas abiertas y una rueda pinchada.

La madre se arrodilló al lado de su hijo. La grava suelta de la calzada se le clavaba en las rodillas, adoptando la forma de puntiagudas espinas. Pero ella no se quejó. Quizás no se dio ni cuenta de las piedras.

Después la mujer sacó un pañuelo limpio de la bata, lo extendió en el aire imitando una diminuta bandera y lo colocó sobre la herida, haciendo presión con la mano para que no se desangrara.

A escasos metros de distancia, Mariana miraba todo desconcertada, sin atrever a moverse, superada por los acontecimientos.

La sirena de la policía sonaba ahora mucho más cerca, haciendo temblar los cristales de las casas. Pero Mariana sabía que era tarde, que de nada serviría que llegaran hasta el cuerpo tendido de su hermano.

Él tenía los ojos cansados, cubiertos de ceniza, como una hoguera que se apaga lentamente en la noche.


lunes, 25 de octubre de 2010

LA PERIFERIA LITERARIA

Pertenezco a esa generación de escritores que rondan los 40 años y que se hallan desgarrados entre dos mundos opuestos.
Por un lado, amamos la cultura del libro, es decir, la tradicional, la de siempre. De hecho, nos gustaría pertenecer a ella con letras en negrita. Pero, por otro, nos adaptamos como podemos al mundo digital y a las redes sociales, con tal de promocionar un poco más nuestros libros.
En este último mundo, me siento torpe, rezagado, con un pesado número 2 en la espalda.
Otros muchos escritores, sobre todo más jóvenes, me aventajan tanto en esa carrera que no sé si algún día podré alcanzarlos.
Sin embargo, a veces, pienso:  ¿qué tendrá que ver todo eso con la verdadera literatura?
Hoy en día un escritor pierde más tiempo diseñando su web o su página oficial, que en meditar la colocación de un adjetivo. (Y los adjetivos son básicos. Basta con echarles un vistazo para saber si nos encontramos ante un buen o mal escritor).
Ya no importa la obra "bien hecha" ni la obra "en marcha"...
Se dedica más tiempo a lo que prefiero llamar la periferia literaria, ese mundo cibernético y artificial, que a la litearatura propiamente dicha.
Y la escritura sólo es eso, ya lo saben, amor y dedicación a la palabra.

jueves, 21 de octubre de 2010

LA CALLE DE LAS LETRAS

Santiago no sacaba buenas notas en el colegio, pero amaba con ardor las letras. Para él eran golosinas, igual que regalices de fresa, que devoraba con avidez mientras paseaba con su madre cogido de la mano por la calle Huertas.
Le fascinaban las letras doradas, escritas con mayúscula, que se hallaban insertadas en las placas de granito del suelo como diminutas estrellas. Cuando veía una de ellas, el niño se detenía delante de los signos, fijaba la vista sobre los reglones de oro y comenzaba a leer despacio, como si el tiempo a su alrededor no existiera.
Su madre le dejaba que descifrara los signos, que leyera un poquito si quería, pero enseguida se cansaba, se ponía nerviosa, y tiraba de él para proseguir con el paseo. Había que llegar a casa, se hacía tarde, y no quedaba más remedio que acabar los deberes de la escuela.
Al llegar a casa, con los cuadernos desplegados con pereza encima de la mesa, el muchacho se resistía a hacer la tarea. No tenía ganas. Prefería cerrar los ojos y dejar libre su imaginación disparatada.
En la oscuridad de su mente, como por arte de magia, las calles del barrio se transformaron en enormes rollos de papel y los edificios de cuatro plantas adquirieron la forma de libros gigantescos.
Todo el barrio era una inmensa biblioteca y los vecinos dejaban sus ocupaciones cotidianas para ponerse sin prisa a leer las citas literarias de las aceras.
Entonces el niño soñaba que bajaba a la calle de las letras doradas y que continuaba escribiendo frases en el suelo de granito, en las paredes de las casas, en los rótulos de los bares, hasta en la tapia de las monjas Trinitarias y en la Academia de la Historia.
Los vocablos que escribía parecían carecer de sentido. Pero Santiago no se cansaba de garabatear palabras como “jirocho” o “pariambo” o “teleósteo”, porque sabía que a la calle de las Letras, como a un texto que no poseyera límites, nadie le pondría poner nunca un punto final.

domingo, 17 de octubre de 2010

PROYECTO DE LECTURA PARA CENTROS ESCOLARES

Con agrado, descubro a mi novela La herida del oso pardo (Palabra, 2010) incluida dentro de las sugerencias de lectura entre 9 y 11 años del PLEC (Proyecto de Lectura para Centros Escolares).
Además, se puede ver en su página una ficha del libro que, aunque breve, me parece bastante acertada.
Entre los temas que trata la novela se menciona la relación entre el hombre-animal, la protección de los animales ( sobre todo del oso pardo), y las relaciones familiares.
Sin embargo, creo que se les ha olvidado un tema importante en el libro: la aceptación y superación del dolor, de las heridas de la vida de las que está llena la obra.
No sé quién se ha fijado en la novela, pero desde aquí me gustaría darle las gracias.
Os dejo el enlace por si os apetece echarle un vistazo.
http://sol-e.com/plec/libros.php?id_libro=11398&mostrar=ficha&desde=novedades

martes, 12 de octubre de 2010

EL SEÑOR DE LAS AGUAS


Aquí os dejo el primer capítulo/borrador de la nueva novela que estoy escribiendo. No es mucho, lo sé; pero a ver qué os parece.
1.
El chico que paseaba por la playa se llamaba Marco.
Bajo una débil llovizna, caminaba despacio y distraído, sin prestar mucha atención al barco que se había detenido en mitad de la bahía, esperando órdenes para atracar en el puerto.
De vez en cuando, el muchacho se agachaba hacia el suelo, introducía su mano en las frías aguas del océano y recogía una concha de colores o el caparazón de una nécora. Luego las miraba con fascinación, igual que un científico curioso, y volvió a arrojarlas contra las olas.
Mientras tanto, el barco de mercancías permanecía impasible, mecido por las ondas, igual que una gigantesca ballena. En la cubierta varios miembros de la tripulación trabajaban sin descanso, arrastrando bultos y cajas de un lado para otro. Desde donde se encontraba Marco, no se distinguía bien lo que movían.
¿Qué sería? ¿Por qué no se esperaban para descargar en el puerto?¿A qué se debía tanto ajetreo?
Al llegar a la boca de la marisma, después de media hora larga de caminata, el chico se detuvo de golpe. Una culebra de agua, de varios metros de ancho, le impedía el paso formando una barrera. Aunque la marea estaba baja a esas horas, tendría que meterse hasta la cintura para poder alcanzar la otra orilla. Aunque otras veces lo había hecho, sobre todo con buen tiempo, esa vez tuvo miedo y decidió no cruzarla.
Antes de darse la vuelta para regresar al pueblo, se subió a unas rocas que descollaban unos metros sobre el nivel del mar. Quería contemplar el paisaje durante unos minutos, sin que nadie le molestase.
Esa mañana las aguas tenían un color grisáceo, semejante al acero. Las islas que cerraban la ancha ría apenas se distinguían en el horizonte, borradas por la niebla. Impresionaba contemplar el mar abierto. Era un espectáculo grandioso, digno de ver. Como un viejo marinero retirado en la costa, Marco nunca se cansaba de observarlo.
Fue al dirigir de nuevo la mirada a tierra firme, cuando lo descubrió por casualidad. Al principio creyó que se trataba de una roca o de una escultura de piedra, pero pronto se dio cuenta de su error.
Era un viejo extraño, de barba larga y con un bastón en la mano, subido a lo más alto de una duna. Llevaba un abrigo raído y un ancho pañuelo anudado en el cuello. Apenas se movía de donde estaba y tenía la vista clavada en el mar, vigilando los movimientos de los barcos que entraban y salían de la bahía.
Marco no sabía de dónde había surgido el anciano. Quizás llevara allí mucho rato, pero él no lo había descubierto hasta ese momento. Envuelto por las nubes, perecía un ser fantasmal o venido de otra época, surgido de alguna novela de misterio.
Pero eso era imposible. Una tontería que se le había ocurrido. El hombre era de carne y hueso, tan verdadero como la lluvia que le estaba empapando la camisa. Además, se estaba haciendo tarde y tenía que regresar a casa. Si su madre le viera así, metido en el mar bajo la lluvia, seguro que le caía una buena bronca por dejarse calar hasta los huesos.
Fue entonces, mientras estaba a punto de iniciar el regreso, cuando apareció la lancha, brincando sobre las olas como un enorme saltamontes. Había partido del buque de mercancías fondeado en la bahía y se dirigía a toda velocidad hacia las casas abandonadas, que había cerca del faro. La nave avanzaba en diagonal, decidida, como si alguien desde la costa le indicara el camino con algún tipo de señas.
Aquella maniobra era bastante sospechosa. No era una barca de mariscadores, ni tampoco una recreación de recreo. Además, iba demasiado deprisa. Por lo menos, a 150 Km por hora.
De forma intuitiva, Marco miró de nuevo hacia las dunas de arena. El anciano del bastón ya no estaba allí y las gaviotas habían levantado el vuelo, asustadas por el motor de la barca.
¿Qué estaba pasando? ¿Qué demonios hacia la lancha dirigiéndose hacia la costa? ¿Quién le estaría esperando?
Marco sintió un profundo escalofrío, que le erizó el vello del cuello. Quizás hubiera sido testigo de una operación prohibida, de algo ilegal, que nunca debería haber presenciado desde lejos.
De súbito, un miedo irracional le dominó. Empezó a sudar por la espalda y a respirar con dificultad. Por más que lo intentaba, no se podía quitar de la cabeza la imagen del barco y del anciano que vigilaba la bahía con detenimiento.
¿Quién sería? ¿A qué había acudido a la playa? ¿Y, sobre todo, qué estaba sucediendo en la bahía?
Varías gotas de lluvia golpearon al muchacho en el rostro y se escurrieron despacio hacia sus labios. Al lamerlas, descubrió con desagrado que eran saladas y que tenían el mismo sabor que las lágrimas.
Cuando la lancha desapareció tras unas rocas, en las proximidades del faro, el muchacho emprendió por fin el regreso a casa. Caminaba deprisa, sin adentrarse en el mar, como si le estuviera persiguiendo una sombra extraña.
Lo único que deseaba con todo el alma es que el viejo del bastón, absorto en las maniobras de los barcos, no se hubiera fijado en su cara.

domingo, 3 de octubre de 2010

LECTURAS ESCOLARES



Con agrado, recibo la noticia de que varios libros míos se están poniendo como lectura escolar en varios colegios e institutos de España.
Por ejemplo, la novela "Días de lobos", que tenéis en la imagen de la derecha, se va a leer en centros de Santander, Fuenlabrada, San Sebastián de los Reyes, Vielha, Madrid, Pozuelo de Alarcón...
A la mayoría de los lectores nunca les conoceré, ni sabré si el libro les ha gustado o no. Intento ponerles cara, pero sólo vislumbro sus rostros como ocultos por una turbia gasa.
El autor nunca sabe si su obra ha dado en la diana. Si el libro que ha escrito, ha encontrado a su verdadero lector, al que iba dirigido.
Mientras tanto, avanzo lentamente escribiendo mi nueva novela.
Llevo un solo capítulo, de unas pocas páginas.
Pero lo importante es que no me abandone el viento que me da siempre ánimo para seguir escribiendo.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

LA RESECA


Se acaba la huelga del 29-S y la cabeza te estalla a causa de un exceso de política.

Durante el día, has sido un peón que otros han movido a su antojo, en un tablero en el que todo te ha parecido un nuevo gran teatro del mundo.

(¿Un escritor se puede poner en huelga? ¿Qué estadística lo recoge?)

Dicen que ha habido algún incidente aislado, casi un centenar de detenidos, manifestaciones a horas programadas y enfrentamientos algo más subido de tono en una ciudad lejana, cerca del mar.

A tu alrededor, en cambio, sólo has visto silencio y vacío - calles huérfanas de entusiasmo, cierres echados, un domingo tedioso, sin paseos ni fiesta para niños.

Las resaca deja un sabor amargo en la boca, un dolor molesto e impreciso en el pecho, igual que un pasquín sucio y desgastado, que ha quedado roto en el suelo.

Por cierto, el día de la huelga también era mi santo. Pero, claro,... ¿a quién le importa eso?

sábado, 25 de septiembre de 2010

UN NUEVO PROYECTO


Es curioso como las historias surgen y se imponen sobre las otras. La que tiene más ímpetu, más pasión, se impone sobre las demás. Eso es lo que me ha pasado ayer.

He empezado una nueva novela.

¡Ojala el Viento me ayude a acabarla, a no dejarla a medias como otras¡

Está ambientada en Galicia, en la costa, concretamente en las Rias Baixas. En ella habrá misterio, mezcla de literatura y realidad, alguna relación sentimental, pero sobre todo un paisaje nuevo, alejado de las montañas y la nieve, que fueron protagonistas de mis otros libros.

Ayer me lo pasé muy bien escribiéndola, aunque apenas avancé un par de páginas.

Pero ya estoy embarcado en un nuevo proyecto, y espero que el viento y las olas no se detengan.

Y es que, cuando los paisajes del verano se empiezan a echar de menos, fructifican en el corazón (o en esa parte desconocida del cuerpo donde se halle la ilusión).

Ya os seguiré contando.

lunes, 13 de septiembre de 2010

SEGUNDO VUELO EN MARCHA

De vuelta de vacaciones, descubro por sorpresa y con alegría que se ha ordenado, durante el pasado mes de agosto, la 2ª edición de mi libro Donde vuelan las águilas (Palabra, 2008).
El escritor siempre teme que nadie oiga sus palabras, que sus libros no gusten, que sus historias imaginadas se encuentran lejos y apartadas de los demás.
Una segunda edición quiere decir que el libro todavía sigue vivo, que hay más lectores que lo esperan sin saberlo, que la botella lanzada al mar continua con su incierta singladura por el mar.
Dos años tardé en que alguna editorial se interesase por el manuscrito de la novela; y otros dos años, menos angustiosos, ha tardado en publicarse esta nueva edición.
¡Ojalá no sea su último vuelo!

viernes, 10 de septiembre de 2010

CON PERMISO DE GARCÍA MÁRQUEZ

Cuando el coronel Aureliano Buendía se enteró de que había recibido una carta urgente, venida expresamente de la Capital, no se hallaba frente al pelotón de fusilamiento como él hubiera deseado, ni levantando revoluciones imposibles por los cerros de Macando.En realidad, se encontraba en el porche de su casa desmoronada, viendo atardecer sentado en una hundida silla de mimbre.
Cuando el coronel Aureliano Buendía rasgó el sobre oficial para leer con avidez su interior, todavía tenía esperanza de que el gobierno se acordara de él y de los otros viejos oficiales que habían combatido a su lado. Pero ahora todos eran viejos, ancianos olvidados, unidos en la misma soledad.
Cuando el coronel Aureliano Buendía leyó con dificultad las primeras líneas del escrito, redactadas en un lenguaje técnico y endemoniado, la misiva le pareció un jeroglífico imposible de descifrar, como los mensajes cifrados de las nubes rojas del atardecer.
La carta le mantenía el tratamiento de coronel - y eso le agradó, ya que hacía años que nadie le llamaba así. Se sintió de nuevo poderoso e importante, como un gallo de pelea en medio de un ardiente coso de arena. Pero él tenía las plumas desgastadas y sin brillo, y desde hacia tiempo había perdido el brío para pelear como en sus tiempos de fiero militar.
Siguió leyendo la carta, ajustando su cansada vista a los rectos renglones gubernamentales, pero no se hablaba en ninguna parte de la pensión, ni de la entrega inmediata de ninguna cantidad de dinero.
De repente, se sintió más solo y desgraciado, como arrojado a la suerte del destino, como el sangrante Sol que declinaba tras los cerros de Macondo.
No sólo el gobierno le rechazaba, sino también la fría noche que crecía a sus espaldas.

lunes, 6 de septiembre de 2010

LA NOCHE DE LOS TIEMPOS



De todos los libros que he leído durante el verano, la novela que me ha parecido mejor y más interesante ha sido, sin duda alguna, La noche de los tiempos del escritor Antonio Muñoz Molina.
Aquí no voy a hacer una reseña detallada del libro, ya que hay muchas publicadas en Internet y, además, realizadas por críticos de prestigio. Aquí sólo quiero compartir lo que la novela me ha aportado como lector y, por supuesto, lo que he aprendido de él como escritor.
El descubrimiento más importante que he hecho es este: narrar no consiste tanto en desarrollar unos sucesos dinámicos y sucesivos en un centenar de páginas, sino en detenerlos con morosidad y emoción, en dilatar el tiempo, casi como si fueran fotografías en blanco y negro o estáticos fotogramas de una película. Desde esta perspectiva, la gran extensión de la obra no es un defecto (como algunos indican), sino un mérito del autor, quizás el mejor narrador vivo en nuestra lengua.
Por otra parte, el libro también hace un uso magistral de los tiempos verbales. Aunque la historia sucede en épocas pasadas (hace más de 70 años), casi toda la novela está narrada en presente. Un tiempo presente que - como dice el propio autor- es el tiempo del miedo, de lo que se hace simultáneo e intenso en un corto viaje por tierras americanas, en un tren que parece no avanzar ni llegar nunca a su destino.
También me han sorprendido gratamente los fragmentos exclusivamente dialogados - por ejemplo, la última discusión de los protagonistas-, donde la maestría del autor hace avanzar la historia únicamente con la voz desnuda de los personajes.
Al final del libro, además, Muñoz Molina introduce de forma sorprendente la narración en futuro. Pero no utiliza este tiempo verbal para narrar un hecho hipotético o posterior, sino para describir lo que todavía no ha sucedido a los personajes, pero a la vez - desde nuestra perspectiva de lector- ya ha sucedido ("Pero ese momento no ha llegado todavía, pertenece a un tiempo aún inexistente, al futuro de dentro de unas pocas horas").
Muñoz Molina no es muy amigo de la narración lineal, pero el libro se lee sin dificultad a pesar del desorden temporal que presenta. La novela tiene toques modernos y contemporáneos. Sin embargo, la extensión de la misma, el amor por los detalles y las enumeraciones prolijas, el tema del adulterio o las escenas de guerra, nos recuerdan a los grandes novelistas del siglo XIX o del XX.
Pero quizás lo más interesante del libro sea el punto narrativo elegido. A lo largo de la novela se superponen varias voces o perpectivas: la ausencia de narrador, un narrador en tercera persona tradicional y otra voz, mucho más misteriosa, en primera del singular.
¿Quién es esta voz que lo ve todo? ¿De quién se trata?
Según lo veo yo, esta voz no es otra que la del propio autor, que imagina hasta el límite lo que sucede, el que agotado de su esfuerzo por novelar nos entrega el relevo para que sigamos imaginando el destino de sus personajes perdidos en la noche como en un pozo, en unos tiempos oscuros y neblinosos, que sólo la memoria de los lectores puede evitar que se olviden.

lunes, 23 de agosto de 2010

LOS NUDOS DEL TAPIZ



Una obra literaria, como cualquier tapiz colgado en las paredes de un museo, puede mirarse de dos maneras distintas: por el lado de la trama de hilos o del dibujo que forman. A la mayoría de los visitantes/ lectores, por supuesto, sólo les interesará el lado visible, el del dibujo donde resplandece la belleza. Sin embargo, al artista/escritor le interesará mucho más el envés, el lado que no se ve expuesto y a la vez sostiene los hilos que conforman la obra.

Los nudos del tapiz no son sólo técnicas o artificios heredados de una tradición, sino que están hechos también con el sudor y la sangre del artista. Por ejemplo, en la poesía de Miguel Hernánzdez los nudos del tapiz son tan gruesos y visibles, que llegan incluso a borrar el dibujo que crean. Góngora podía componer los más bellos dibujos amorosos del Barroco, pero nos dejan fríos...¿por qué?

El misterio de la obra literaria radica más en el envés, en el trenzado de esos nudos, que en la forma del dibujo. Nudos que abren heridas y cortes en los dedos, que no deben realizarse de una manera mercantil o mecánica, sino como un artesano que cuida con esmero cada hilo que anuda entre sus manos.

lunes, 16 de agosto de 2010

LA ISLA DE HIELO


A veces la página de un blog se parece mucho a una isla de hielo, que se mueve bajo la mirada de nadie, por un mar invisible. Las olas oscuras se encrespan a sus costados, le lamen con su sal corrosiva, mientras que la luna le anuncia su muerte, cubriéndolo con su luz mate y amarillenta de naipe. Pero el iceberg sigue avanzando con lentitud, derritiéndose a cada paso, a cada impulso, como las palabras que un tartamudo no termina nunca de pronunciar en los labios.

A veces la escritura se tiñe de cansancio y de desánimo, de hielo malsano. A veces escribir nos sumerge en nuestro vacío, como una manos ansiosas que no encuentran nada en los bolsillos.

El escritor comienza donde terminan sus libros. La escritura siempre es la palabra siguiente, la que no está dicha, la que nos amenaza con su fracaso, con no conseguir nunca su forma definitiva.

A veces escribir se parece mucho al final del verano, cuando las playas se quedan desiertas y el viento en remolinos nos recuerda el frío como un negro heraldo.

En la noche marítima, la isla de hielo continua avanzando por el mar invisible. Sabe que su dicha es entregarse, dejar de ser hielo blanco, para acabar formando parte del oscuro mar que, con su áspera lengua, le lame y le derrite.

lunes, 9 de agosto de 2010

LECTURAS DE VERANO

Por sorpresa, he descubierto en Internet varias listas con recomendaciones de lectura para el verano en las que se incluyen algunos libros míos - La herida del oso pardo (Palabra, 2010) y Días de lobos (Bruño, 2010)-, publicadas durante la primavera pasada.
Recomendar un libro es una cuestión delicada. Supone descartar unos por razones más o menos objetivas o caprichosas, y apostar por otros. No se trata de hacer justicia, sino de mostrar unos gustos.
Estas listas de verano, como las que preparan los profesores para sus alumnos, son importantes para animar a la lectura a los chicos y chicas. Creo en ellas mucho más que en los planes fastuosos de los ayuntamientos, diseñados por concejales de cultura que no cogen un libro ni en pintura.
Estas listas de libros, realizadas muchas veces por bibliotecarios anónimos,suelen ser discretas, amplias, variadas, hechas con mimo. Os dejo el enlace de algunas de ellas:

www.bibliotecaspublicas.es/alicante/publicaciones/verano10_juvenil.pdf

www.issuu.com/.../guia_de_lectura_verano_2010_ies_vega_del_guadalete

www.fomento.edu/imgeditor/infantil%20y%20juvenil_verano10.pdf

miércoles, 4 de agosto de 2010

EN FRANCÉS


No es fácil que una editorial se interese por el manuscrito de un autor, sobre todo si su nombre no es muy conocido; pero mucho más difícil todavía es dar el salto, es decir, que una editorial extranjera te lea con detenimiento, te traduzca con cuidado y te incluya en sus colecciones.
Dos de las biografías noveladas por mi amigo Julio César Romano, acaban de ser publicadas en francés, en Édicions de l´Emmanuel.
Me alegro mucho por Julio César, porque su trabajo nocturno y silencioso de tantos días se lo merece.
Además, la edición de las novelas está muy cuidada, signo de que la editorial valora y respeta el trabajo del escritor. Todos sabemos que eso no ocurre siempre.

¡Enhorabuena, Julio¡
Estoy seguro de que no será la única lengua en que se traduzcan tus libros.

jueves, 15 de julio de 2010

RETRATO Y NATURALEZA

El pasado 2 de Julio mi amigo y pintor Miguel Sanz Romero inauguró una nueva exposición de sus cuadros en Lavapiés, en la calle Argumosa 30, muy cerquita del museo Reina Sofía.
En ella se puede contemplar sus cuadros, realizados con diversas técnicas, que tienen como motivo de unión el retrato de animales y de personas.
El cuadro que aparece en el cartel anunciador, que tenéis a la izquierda, está basado en mi novela Días de lobos (Bruño,2010) y me hubiera gustado que hubiese sido la portada del libro.
El cuadro me encanta, ya que recoge el espíritu que quise transmitir en la novela.
La exposición estará abierta durante todo el verano. Ya sabéis. Tenéis que ir a verla.

lunes, 12 de julio de 2010

LA BOMBILLA

A Pepe.
La bombilla de la lámpara parpadeaba intermitente, en agónica lucha consigo misma, como si le faltase la luz.
Yo intenté apretarla en el envejecido casquillo de cobre, sujetarla a la débil corriente que la mantenía viva, pero enseguida me di cuenta de lo estéril de mi intento. De sobra sabía que estaba a punto de fundirse, que apenas le quedaba tiempo de vida, igual que a un enfermo que agoniza sobre la cama de un hospital.
Cuando se extinguió de un fulminante fogonazo, comprendí que había alcanzado, por fin, la paz.

viernes, 2 de julio de 2010

EL BAILE de IRÈNE NÉMIROVSKY


Ahora se llevan los libros voluminosos, los best-seller que estiran la historia como un chicle desgastado, a los que le sobran diálogos insulsos, descripciones minuciosas y escenas sin emoción.

El baile de Irène Némirovsky (Salamandra, 2006) es todo lo contrario. La trama se desarrolla en apenas 100 páginas. Se trata de una novela intensa, emocionante, que caracteriza a la perfección la deteriorada relación entre madre e hija y el ansia de reconocimiento social de una familia de unos nuevos ricos en París a principios del siglo XX.

Irène Némirovsky escribió esta obra con tan solo 27 años. Sorprende por su talento narrativo y por el acertado retrato de los personajes, sobre todo femeninos. Basta un movimiento de manos, un gesto contra el cristal de la ventana para que el lector se dé cuenta de lo que está pasando y de lo que siente en su interior cada personaje.

A mí me gustan los libros así: esenciales, básicos, contundentes, a los que no les sobran ni les falta una palabra. Esta novela, por tanto, la considero un pequeño diamante. Escrita con la intensidad de un relato, pero comparable, por su profundidad psicológica, a cualquier otra gran obra literaria.

miércoles, 30 de junio de 2010

NO DIGAS QUE ESTÁS SOLO



El pasado 24 de junio la novela juvenil No digas que estás solo (Bruño, 2009) ha sido incluida en la Lista de Honor del premio CCEI 2010. Con este último reconocimiento, César Fernández García culmina un año redondo, lleno de premios y de éxitos, entre los que destaca el premio La Galera por su libro La última bruja de Trasmoz o el premio de narrativa juvenil Ciudad de Jaén por su obra Ellos.

No digas que estás solo es una novela de género, muy del estilo del autor, donde el misterio, el suspense y la intriga atrapan al lector desde el capítulo de arranque. La acción transcurre en Cotela, un pueblo abandonado del Pirineo aragonés. Allí van a hacer un reportaje dos becarios de televisión, Begoña y Alberto. Sin embargo, de forma inesperada, el rodaje se complica. Van a suceder múltiples hechos inexplicables y escalofriantes. Una extraña presencia y un alma asesina parece latir en la aldea.

Mis alumnos, que lo han leído durante este curso, aseguran que les ha encantado, aunque pasan un poco de miedo leyéndolo. El libro, de verdad, merece la pena.

domingo, 27 de junio de 2010

EL VIAJE DEFINITIVO


La gente se mueve. Los torniquetes se mueven. Todas las cosas a mi alrededor se mueven.

Cuando el tren detenga su marcha en la estación, algo se moverá, también, dentro de mí. Caeré en un pozo,en mitad de las vías, como si lo hiciera en el interior de una fosa profunda.

Entonces, durante unos segundos, el andén permanecerá en silencio, congelado, detenido por el estridente ruido de las ruedas.

Y yo seré la única persona que emprenderá el viaje, el definitivo, a lo más apartado de la vida.

miércoles, 23 de junio de 2010

El BLOG COMO GIMNASIO

Un blog puede ser un escaparate comercial, un enorme anuncio que se publica a diario, un sofisticado tenderete donde se venden palabras a cambio de píxeles; pero también un confesionario con las puertas abiertas, un infinito laberinto de libros, una tarjeta de visita para conocer a seguidores desconocidos.
Yo entiendo el blog como un gimnasio, como un recinto donde el escritor se entrena y ejercita sus músculos literarios. A mí, por ejemplo, me encantan las espalderas de las frases cortas. Allí me paso las horas muertas. Me sirven para expresarme despacio, para buscar la imagen precisa y el adjetivo exacto.

Creo en el blog inútil, sin publicidad, que se comparte como el pan en una mesa o el vino en una fiesta.

Esta humilde página, a la que no he añadido ni una triste fotografía, sólo quiere ser un ejemplo de ello.

martes, 22 de junio de 2010

DE SÓTANOS Y AZOTEAS



DE SÓTANOS Y AZOTEAS
JUAN CARLOS FERNÁNDEZ LEÓN
EDITORIAL CASTALIA, 2010

Con De sótanos y azoteas, Juan Carlos Fernández León obtuvo el XX Premio TIFLOS de Cuento 2010. Aunque se trata de su primera obra publicada, nos encontramos ante un autor sólido y de agradable lectura, con muchas tablas y horas de oficio, que demuestra un sorprendente talento en cada uno de los 9 relatos que componen este libro.
La mayoría de los cuentos (sobre todo los titulados Los imperdibles de la memoria, Se van a ver las navajas o el que da nombre al libro) están ambientados en un barrio del extrarradio, un lugar mítico y abandonado, donde nunca parece cambiar nada y donde siguen vigentes leyes ancestrales, no escritas, que sólo conocen los que viven desde pequeños en sus calles. Muchos de estos relatos son como viejos baúles llenos de recuerdos, repletos de imágenes y de objetos que fueron nuestros, pero que ya no nos sirven y a los que echamos una última mirada distante y emocionada. Son los residuos de la infancia, lo que se nos ha quedado prendido en la memoria, lo que el autor, con su excelente prosa, nos permite recuperar.
Llama también la atención la sensibilidad que el autor muestra hacia los perdedores de la vida, los marginados, los que han perdido sus raíces, en definitiva, hacia los débiles del mundo. Este compromiso del autor, sin caer en tópicos, dota de mayor consistencia a su escritura.
En definitiva, un buen libro de cuentos, a medio camino entre el realismo sucio americano y la mejor tradición española, que no defraudará al lector que quiera gozar de una de las voces más interesantes de la actual narrativa española.

jueves, 17 de junio de 2010

LA LIBERTAD DE LO DESIGUAL


PEDRO ANTONIO URBINA
MEMORIAS Y OTRAS VIDAS
PALABRA, 2010
PAU siempre fue un gorrión solitario en el tejado, un escritor alejado o separado de los circuitos comerciales, marginado y marginal, exquisito y cercano a la vez.
En su último libro Memorias y otras vidas, publicado póstumamente, se recogen 17 relatos inéditos, organizados en cuatro series o apartados. Aunque la edición no fecha los cuentos, el libro llama la atención por la unidad formal y estilística que presenta.
La temática que desarrollan las narraciones es muy variada: los recuerdos de infancia en una ciudad junto al mar, el verano como tiempo de diversión y de dolor, la rabia de haber crecido, de haber perdido la pureza de las cosas más sencillas, los sentimientos de soledad y desamparo, la falsedad de las relaciones sociales, el drama de la falta de autenticidad, la memoria unida a la facultad de hablar, la belleza que se halla en lo pequeño y natural, el deseo de ir siempre más allá, la búsqueda constante de lo que se ha ido, la doblez de la vida con sus anversos y reversos, la libertad de lo desigual...
Además, el libro está impecablemente escrito, con variedad de registros y de voces, donde predomina el amor por los detalles, normalmente vinculados al color o la música. Como escritor, PAU desprecia los periodos largos y las frases ampulosas. Su estilo es directo, certero, como una flecha dirigida al corazón. Su compromiso con la belleza es constante y sus relatos, más que narraciones, son desnudos poemas en prosa.
Después de leer el libro, he descubierto que PAU era un verdadero mago de las palabras, capaz de rescatar del tiempo "las imágenes eternas de las cosas". Con su compromiso con la escritura, siempre elegante y de alta calidad, nos enseña que en la vida, como en la literatura, siempre "vale la pena ser desigual".

lunes, 14 de junio de 2010

FONDO DE ARMARIO

A veces los escritores no sabemos qué historia ponernos para salir a la calle. Abrimos el armario de los argumentos, repleto de viejos mitos y leyendas, y no hallamos ninguna trama que nos guste, que nos quede bien frente al espejo, que se ajuste a lo que buscamos.
Después de mover frenéticamente las perchas de un lado para otro, como una mujer obsesiva que se prepara para una fiesta de gala, por fin escojo una idea sobre la que puedo escribir mi próximo libro. Todavía es sólo un embrión, un sueño borroso, que carece de forma definida. Se trata de un argumento realista, protagonizado por un delincuente que logra salir del Infierno donde sin querer ha caído.
Sin embargo, me doy cuenta de que la historia me queda estrecha, que me molesta en los hombros y en las mangas, y tengo que abandonarla al cuarto capítulo.
Desorientado, también nervioso y desanimado, pienso rápidamente en otra historia. Busco una camisa más a la moda, con rayas elegantes y personajes de diseño. Pero después de encontrar la prenda al final del armario, en el apartado de historias paranormales, pronto me doy cuenta de que tampoco es lo que busco.
Entonces, a punto de tirar la toalla, echó una mirada a mis viejas ropas, a las que estaban guardadas en un cajón, a las que llevo tanto tiempo sin ponerme.
Con sorpresa, me las pruebo y descubro que son de mi estilo, modesto y quizás demasiado sencillo, pero en el que me siento cómodo.
Ya sé sobre lo que voy a escribir.
A Tito y a Sofía, los protagonistas de mi novela Días de lobos, les espera una segunda parte, una nueva aventura, un nuevo e inquietante misterio que resolver.

miércoles, 9 de junio de 2010

DÍAS DE LOBOS


Esta novela juvenil publicada por la editorial Bruño fue la segunda que escribí, hace ya más de tres años, aunque por razones que desconozco fue la cuarta en publicarse. En realidad, hace apenas nada. En abril de 2010.
Con ella quería alejarme de mi primer título Donde vuelan las águilas. Sin querer, había caído en un exceso de sentimentalismo y de lágrimas. Necesitaba otro tipo de novela y otro tipo de trama.
Lo que buscaba entonces era escribir una novela de aventuras, con intriga y suspense hasta el final, donde los sustos y los cambios de giro atraparan al lector. Buscaba, en definitiva, una novela juvenil al uso, que pudiera gustar a un chico o una chica de trece o catorce años.
En lo que no cedí fue en cuidar el estilo.
La literatura juvenil muchas veces cae en un estilo funcional y pragmático, que se aleja del verdadero arte. En la redacción de la novela intenté mantener un estilo cuidado, con numerosas imágenes, porque, para mí, la literatura sobre todo es amor por la palabra.
Toda la novela se desarrolla en un recóndito valle de las montañas de León, en la comarca de Babia, que en el libro prefiero llamar Lupama. Es una región montañosa y agreste, cubierta de nieve y de hielo durante el largo invierno, donde sobreviven cazando corzos y rebecos las últimas manadas de lobos.
El libro puede interpretarse como un canto a la Libertad y la Naturaleza. Imagino que esa será la lectura que hará un lector juvenil que haya leído el libro. Sin embargo, yo lo veo como un homenaje literario a autores leoneses como Julio LLamazares. Si en mis tiempos de universitario no hubiera leído La lluvia amarilla, estoy seguro de que la obra Días de lobos no existiría.
Con esta novela quise no solo contar una historia, sino transmitir una emoción hacia un paisaje y una tierra legendaria y prácticamente olvidada.
¡Ojalá lo haya conseguido!

martes, 8 de junio de 2010

SEGUNDO VUELO



El título que he puesto a este blog coincide con el de mi primera novela juvenil publicada (Palabra, 2008), a la que por motivos personales más que literarios le tengo mucho aprecio. Basta con leer la dedicatoria que aparece en las primeras páginas para entenderlo.
En la primera versión de la novela, la obra no se llamaba así. El libro cuando apenas tenía poco más de cincuenta páginas se titulaba "Visión de águila". Un poco abstracto, quizás poco sugerente, pero no estaba del todo mal, creo.
¿Por qué lo cambié entonces?
Imagino que el título no me convencía,que era bastante mediocre, aunque ya aparecía en él el motivo central de la novela: un águila salvaje que mira con ojos atentos la vida de una chica de ciudad.
El título definitivo de la novela vino a mí sin querer, como suele ocurrir estas cosas. Estaba releyendo unos poemas de Leopoldo Panero, dedicados a la sierra del Guadarrama, cuando un verso me cautivo. Como suelo hacer, busqué el lápiz de punta desgastada, que siempre me acompaña en la lectura, y subrayé el sintagma que resumía la idea que yo quería trasmitir con el libro.
Entonces creía que la escritura era semejante al vuelo de un águila con las alas desplegadas, que sobrevolaba la vida en otra esfera más alta o más pura. La protagonista del libro también deseaba huir a esa esfera perfecta para escapar del dolor de la vida.
Ahora, en cambio, sé que la escritura debe ser algo muy distinto. Se trata más de un caminar hacia dentro, de un recorrer o recuperar galerías internas; que un volar hacia fuera o lo más elevado.
Aun así, me sigue fascinando las águilas que sobrevuelan los ciegos cielos del verano.
Siempre me acordaré del ejemplar salvaje que se posó a escasos metros en la solitaria carretera que va de Quejo a La Cueta (León), y la que pasó por encima de mi cabeza en Huesca rozando el inhiesto campanario de un templo como una promesa.
También he visto águilas en el zoo con mi familia, pero esas estaban encadenadas, demasiado adiestradas y sumisas, y - no lo puedo evitar- me daban mucha pena.

lunes, 7 de junio de 2010

EL PRIMER VUELO

A pesar de mis cuatro libros publicados, todos ellos destinados al público infantil y juvenil, me siento ahora, al comenzar este blog, como una cría de águila torpe e inexperta, que se resiste a abandonar el nido donde ha estado protegido en el anonimato durante tanto tiempo.

Sé que no queda más remedio que emprender el vuelo, lanzarse al cielo manchado de nubes dispersas, y demostrar si mis palabras aladas pueden elevarme y sostenerme sobre las corrientes de aire cibernéticas.



El primer vuelo es difícil, tenso, angustioso. Por eso es corto, tímido, sin ninguna belleza.



En próximas entradas prometo hablar de mis libros y de todos los eventos que estén relacionados con ellos.

¡Bienvenidos a todos!