La "vuelta al cole" no es un asunto menor o baladí para los escritores, por los menos, para los que nos dedicamos a la literatura infantil y juvenil (LIJ).
La vuelta al colegio es la época del año en la que miles de estudiantes regresan a las aulas, pero también es el momento en que se eligen cientos de lecturas para clase, que esos mismos alumnos realizarán durante el curso.
La LIJ todavía depende de ese público o mercado escolar. De hecho, la mayoría de los títulos que se publican forman parte de catálogos diseñados especialmente para colegios o para bibliotecas de aula.
Negar esto - creo yo- supone negar la misma realidad de la literatura infantil en España.
Por eso, al llegar estas fechas, los escritores LIJ cruzamos los dedos.
Hay cientos de autores y miles de libros, pero...¿habrá algún profesor o maestra que se fije en alguna de nuestras obras?
¿Las adoptaran y las cuidarán durante el curso como deseamos?
¿Los alumnos las leerán con entusiasmo?
Ya sé que algunas de mis obras han tenido la suerte de ser elegidas en varios colegios e institutos de Madrid, Fuenlabrada, Valle de Arán... Sin embargo, ¿hasta dónde volarán mis libros este curso? ¿En qué manos, todavía desconocidas, se posarán?
Esperemos que lleguen a muchos lugares. Es lo que mantiene una lij tan sana, los colegios y los profesores, bastante exigentes y buenos lectores.
ResponderEliminarSí, Julio, tienes razón. Esos profesores exigentes y buenos lectores, que también los hay, hacen mucho bien a la LIJ.
Eliminar