Estoy trabajando en un nuevo proyecto, en un libro infantil para primeros lectores. Se trata del primero que escribo y no sé si acertaré con el tema y el tono que debo emplear.
Los libros infantiles parecen demasiado simples, muy facilones. Sin embargo, por lo menos para mí, son complicados de escribir.
Llevo sólo 10 páginas. Trabajo con lentitud y avanzo con dificultad, tropezando en cada punto y seguido.
No se trata de añadir palabras, sino de dejar el texto desnudo: decir únicamente lo esencial.
He descubierto que escribir un cuento infantil se parece mucho a componer un poema. Está muy lejos de la novela, de la narración larga y extensa.
No sé bien qué pasará con el nuevo proyecto. Ya os lo contaré cuando llegue al final.
Los libros infantiles parecen demasiado simples, muy facilones. Sin embargo, por lo menos para mí, son complicados de escribir.
Llevo sólo 10 páginas. Trabajo con lentitud y avanzo con dificultad, tropezando en cada punto y seguido.
No se trata de añadir palabras, sino de dejar el texto desnudo: decir únicamente lo esencial.
He descubierto que escribir un cuento infantil se parece mucho a componer un poema. Está muy lejos de la novela, de la narración larga y extensa.
Ja, ja, a mí me ha pasado lo mismo pero con la novela juvenil que estoy escribiendo, ¡qué difícil es cambiar de registro cuando estás acostumbrado a escribir para lectores de otras edades!
ResponderEliminarMucho ánimo, Miguel, ya verás como ese proyecto sale adelante.
Un abrazo :)
Gracias por los ánimos, Susana
ResponderEliminarPor cierto, ¿qué tal vas con tu novela juvenil?
Seguro que vas a tener también mucha suerte con ella.
Pues me pasa un poco como a ti. Voy lenta, tengo muchas dudas. He tenido que repasar y corregir varias veces lo que llevo escrito (que no es mucho) para ir dándole el punto que quiero.
ResponderEliminarPero bueno, me va gustando el resultado y creo que al fin lo he encauzado. Vamos, la ilusión de que la cosa salga bien no la he perdido. Aunque hay muchos detalles que todavía tengo que pulir, claro.
Oye, Miguel, que a lo mejor te pido algún consejo, que tú de esto sabes más ;)
A veces cuesta coger "el punto", como tu dices. Sin embargo, cuando lo logras, todo es mucho más fácil. Hay que trabajar,por supuesto; pero las piezas van encajando poco a poco, incluso a veces fluyendo como un nervioso río de montaña.
ResponderEliminarSi te puedo ayudar en algo, dímelo.
Pueda que te sirva o que no.
Pues te tomo la palabra porque seguro, seguro, que me servirá.
ResponderEliminarTe enviaré un correo con mis "dudas". Son pocas, pero importantes. Gracias mil.